Por: Vanessa Andrade – responsable comunicación Regnum Christi Tuxtla Gutiérrez
Del 25 al 27 de enero, se llevó a cabo en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, el esperado triduo de la sección de señoritas de la localidad de Tuxtla Gutiérrez. El triduo fue llamado: “¡Qué a gusto es estar con Dios!”.
La actividad se realizó en el Hotel Hacienda San Juan y se impartió con el apoyo del director de la localidad de Tuxtla, el P. Javier Caballero, L.C.
Los temas que tocaron el corazón de las 10 participantes fueron basados en el amor de Dios a través de la belleza de la naturaleza y de la creación.
[AFG_gallery id=’95’]Karla, una de las participantes, nos compartió su vivencia: “resolví muchas dudas que tenía de mi fe y me volví a encontrar con Jesús, sanó mi corazón; y con la ayuda de Liz pude entender muchas cosas que Él me trataba de decir pero yo no comprendía. Estoy muy agradecida con Dios y con mi familia por haber tenido la oportunidad de participar en este retiro”.
La consagrada habló sobre los temas del triduo, enfocados en las inquietudes de las señoritas, “en los trascendentales de Dios, que son belleza, bondad y verdad”.
Sobre cada uno de los temas compartió un poco, aseguró que “dentro de la belleza está la contemplación y la Creación, que es sobre dónde Dios está, y que todo lo creado fue hecho para mí”.
Para abordar el tema de la bondad, las asistentes vieron la película: “La Cabaña”, que fue explicada por la consagrada, quien tocó varios temas sobre la existencia del mal. Respondieron preguntas tales como: ¿por qué lo permite Dios?, ¿por qué me pasa a mí si soy una persona buena?, y sobre desastres naturales, como terremotos, enfermedades, ¿por qué suceden?, ¿por qué Dios lo permite?.
En el tema de la verdad, se tocaron temas como: ¿quién soy? ¿para qué fui creada? ¿cuál es mi misión en la vida?, el llamado a la Santidad y el tema de la castidad.
La consagrada ayudó a resolver dudas con bases sólidas, retomando el catecismo, otros escritos y palabras del Papa. Con mucha emoción comentó que le pareció bello que las participantes pidieron adoración nocturna el sábado por la noche, un día antes de concluir el triduo.
Además de las pláticas, las participantes tuvieron varios momentos de reflexión, contemplación y oración, realizándose el encuentro en un ambiente de convivencia, oración, contemplación y mucho respeto.
Ximena, una participante, compartió: “me sentí muy feliz de haber vivido esta nueva experiencia”. Comentó que en la adoración nocturna platicaba con el Santísimo, “yo sentía que hablaba con un amigo más; yo sé que Él tal vez sabe lo que siento y lo que pienso, pero sé que Él prefiere escucharme; yo ayer me desahogué con Él y me sentí muy bien, me ayudó mucho a sentirme más cerca de Él y así es como quiero estar, cerca de Él y sentir su calor”.
El triduo de señoritas finalizó con una misa en compañía de sus familiares en un caluroso ambiente de amor y hermandad, a la par de la misa del triduo de señores llevada a cabo por el P. Javier Caballero, L.C.
Fotos: Geydi Gress, directora sección señoritas Tuxtla
