Los días 17, 18 y 19 de noviembre se llevó a cabo el Triduo de renovación de señoras de la Localidad de Veracruz del Regnum Christi, en el Centro misionero San Rafael Guízar y Valencia en Chilapa, Veracruz, con una participación de 51 señoras de las secciones de Veracruz, Córdoba y Orizaba.

La señora Cecilia Arzamendi, asistente de la localidad de Orizaba, dirigió unas palabras de bienvenida: “Hoy, Dios nos ha llamado para experimentar el amor de Jesucristo en el silencio; en este bello lugar al que todas le llamamos «un pedacito de cielo»”.

El P. Juan Antonio Torres, L.C. , director local, impartió un triduo lleno de riqueza espiritual, con meditaciones que nacieron de sus reflexiones personales, sugerencias recibidas a través de la predicación o escritos de otros compañeros y amigos sacerdotes.

El triduo comenzó con unos consejos para aprovechar los ejercicios espirituales: pedir a Dios la gracia de acercarnos a Él con el conocimiento íntimo y experimental con que solo le conocen los que saben amarle, llegar hasta Él, y saborear su contemplación más con su amor que con su raciocinio y pedir luz al Espíritu Santo.

En la plática introductoria se aconsejó seguir un recogimiento para llegar a un encuentro con Dios, con nuestro Padre, con Jesús. Hacer un silencio alrededor, alejar el ruido, las distracciones que llevan la mente fuera de nosotros mismos.

Ser humildes. Para favorecer la humildad, ayuda mucho reconocer los pecados, las ofensas a Dios. Por ello, a la humildad va ligada la pureza de corazón.

Otra meditación se tituló “El Regnum Christi en la entraña del Evangelio”. El misterio de Cristo es insondable. ÉL es el rostro misericordioso de Dios que viene a nosotros a salvarnos y para mostrarnos la infinidad de su amor.

Como parte de su carisma, los miembros del Regnum Christi están llamados a “hacer presente el misterio de Cristo que reúne en torno a sí a los apóstoles, les revela el amor de su corazón, los forma y los envía para colaborar en la instauración de su Reino en los corazones de los hombres y en la sociedad”. (EFRC N.4)

En este triduo se introdujo a la meditación sobre el modo de actuar de Cristo en su papel como formador de hombres. Para ello se contó con unas platicas impartidas por la señora Ángeles Navarrete: «La identidad del Regnum Christi: Vivir y hacer presente el misterio de Cristo».

El retiro concluyó el jueves 19 de noviembre con la celebración eucarística y la renovación de compromisos como fieles asociados al Regnum Christi de las participantes.

Como miembros del Regnum Christi, Jesús nos llama a imitarlo: “Id, y hacer discípulos” se puede escuchar el eco de aquellas otras palabras que Jesús pronunció al inicio de su ministerio: “venid y os haré pescadores de hombres”. Ahora nos toca a nosotros hacer lo mismo: salir a buscar a otros para que puedan también ser formados como discípulos de Jesús.