“Mi pasión por acompañar a los papás nació de mi propia necesidad. Aun con formación, me di cuenta de que como mamá me faltaban herramientas. Y si me pasaba a mí, seguramente muchos otros se sentían igual”, nos comparte Alicia con humildad. Así comenzó un camino que la ha llevado a acompañar a cientos de familias a través de charlas, recursos y talleres.

Alicia identifica uno de los mayores retos de la crianza actual: sentirnos inadecuados. Creer que el mundo ha cambiado tanto que nuestros valores ya no aplican, y entonces delegamos lo que solo el corazón de papá y mamá puede dar: amor, presencia y guía.

“Estamos llamados a ser los primeros formadores. Nadie ama como un papá y una mamá pueden hacerlo.”
Alicia Contró.

Lo que verdaderamente transforma a una familia es que los padres se formen, no desde el miedo ni el control, sino desde la esperanza y la claridad. “El miedo saca lo peor de nosotros”, dice. En cambio, formarse abre los ojos y el corazón. Nos da herramientas para detectar lo que no está funcionando y nos anima a actuar con amor y propósito.

Para Alicia, formar el corazón de un hijo no es otra cosa que ayudarlo a saberse profundamente amado, invitarlo a descubrir su misión única en el mundo y enseñarle a dar y recibir amor. Pero también insiste en que ese camino comienza en nosotros mismos. Formar el corazón de tu hijo pasa por formar el tuyo.

Desde esta convicción, Alicia colabora activamente con Familia Unida  y Escuela para Padres, donde se ofrecen espacios de formación accesibles, actualizados y profundamente humanos. “No son programas estáticos; buscan responder a las necesidades reales de las familias de hoy, con herramientas prácticas, comunidad y esperanza”.

Para quienes no saben por dónde empezar,  Alicia recomienda Escuela para Padres Online, una plataforma accesible para cualquier familia del mundo, con contenidos adaptados a cada etapa y a cualquier circunstancia. No importa si tu comunidad educativa no la tiene, cualquier papá o mamá puede hacer la diferencia en su familia.

“Eres el papá, la mamá que tus hijos necesitan. Solo hay que sacarle brillo. Somos suficiente. Solo hay que aprender a dirigir el amor.”
Alicia Contró.

Que estos consejos toquen el corazón de cada papá y mamá para que Dios los guíe en el camino de acompañamiento de los hijos en cada etapa de la vida familiar.