El 20 de junio de 2024 se llevó a cabo el retiro mensual de la localidad de Chetumal, destinado a la sección de señoras e invitadas. Esta actividad se realizó en el Centro Misión Chetumal, Quintana Roo, y fue convocada por la directora local, Margarita Alonso González y el tema del retiro fue impartido por el P. Daniel Preciado Madero, L.C.

La oración preparatoria del retiro fue: “Señor, permítenos conocerte un poco más, y conocer tus palabras para poder hacerlas vida”. La meditación buscaba conocer mejor a Jesús a través de los ojos de San Mateo, apreciando su mensaje que invita a ser “piedras vivas” de la Iglesia y valorar la vida en comunidad.

Mateo era un cobrador de impuestos en Cafarnaúm antes de seguir a Jesús, él ofreció un gran banquete a Jesús, suscitando críticas de los escribas y fariseos por su cercanía a los recaudadores de impuestos y pecadores. La respuesta de Jesús fue: “No tienen necesidad de médico los que están sanos, sino los que están enfermos”, de este modo marcó profundamente a Mateo, quien dejó todo y se convirtió en uno de los doce Apóstoles.

El evangelio de San Mateo es destinado a personas que ya creían en Jesús, reflejando las costumbres y posiciones de cristianos de origen judío y no judío, y mostrando los conflictos con el judaísmo de su época. Sus escritos nos enseñan que Cristo nos llama en el estado y condición de vida en la que nos encontremos y con los talentos que cada uno posee.

San Mateo presenta a Jesús como el Mesías que proclama la llegada del Reino de Dios, cumpliendo la ley y las profecías mesiánicas del Antiguo Testamento. Este evangelista describe a Jesús como el Hijo de Dios que ama al Padre, el hijo prometido a David, y el Mesías que trae liberación y salvación por lo que subraya la importancia de la misión de la Iglesia de proclamar esta buena nueva a todos los pueblos.

A Mateo se le conoce como el Evangelista de la Iglesia por su énfasis en la vida comunitaria y por proporcionar pautas a los líderes de la Iglesia sobre cómo guiar a los fieles, tomar decisiones y cumplir su misión.

El retiro concluyó con reflexiones sobre la importancia de pertenecer a la comunidad de Regnum Christi y valorar la vida de equipo, como una verdadera comunidad de apóstoles. Se invitó a los participantes a reflexionar sobre su rol en la comunidad y a sacar verdaderos propósitos para su vida como miembros de la Iglesia.