Un camino de fe y esperanza
El sábado 12 de abril de 2025 los niños de Club NET, Centro Misión de Chetumal, vivieron una significativa experiencia espiritual al acompañar a nuestro Señor Jesús en su calvario. En esta ocasión oraron y meditaron las 14 estaciones del Viacrucis Infantil, un evento que los acercó más a su fe y les permitió reflexionar sobre el sacrificio y la esperanza que nos ofrece Cristo.
El recorrido comenzó en la Iglesia de la Inmaculada Concepción y continuó en la capilla de María desatadora de nudos, espacios que fueron generosamente facilitados por el Seminario menor, al que agradecemos su apoyo para realizar estas actividades. A través de este acto, los niños pudieron vivir una experiencia profunda, que les permitió comprender cómo las dificultades que enfrentó Jesús durante su Pasión reflejan también los desafíos que cada uno puede encontrar en su vida, pero con la certeza de que siempre hay esperanza y redención.
El Viacrucis Infantil no sólo fue una meditación espiritual, sino también una oportunidad para fomentar el desarrollo de valores fundamentales en los niños, como la resiliencia, el amor y la valentía frente a las adversidades. Este camino de fe les proporciona herramientas para afrontar los retos de la vida con un corazón lleno de esperanza.
Al finalizar la actividad los niños y algunas de sus familias compartieron una comida y convivieron en los hermosos jardines del Seminario menor, fortaleciendo los lazos de comunidad y fraternidad. Este evento fue organizado por la directora local, Karenina Pérez Escalante, y las guías de Club Net: Silvia Gabriela Ríos García, Ma. Teresa de Jesús Medina Ruiz, Susana Guadalupe Uc Campos, Ariadne Gutiérrez Sánchez y Yadily Montalvo Átala.
“Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque de los tales es el Reino de los Cielos” (Mateo 19:14). Este pasaje resalta la importancia de los niños en el Reino de Dios y su capacidad para enseñarnos sobre la pureza, la fe y el amor incondicional.
Al concluir esta jornada de oración, reflexión y convivencia, se recordó a los niños y a las familias la importancia de dar cada paso con amor, sin importar cuán difíciles puedan ser las circunstancias. Con la fe en el corazón podemos hacer del mundo un lugar más amable, lleno de esperanza y unidad.